
Irrumpió en un mundo completamente masculino y, sin ser periodista, logró transformarse, hasta hace poco tiempo, en la editora general de una de las revistas nacionales, especializadas en música, más importantes del último tiempo, Rockaxis. Aquí su visión sobre este oficio.
Sebastián Herrera
Más de una década trabajando para Rockaxis la hacen una voz necesaria para analizar el actual momento de los medios dedicados a la música. María de los Ángeles Cerda ha creado espacios periodísticos que ahondan en miradas colectivas, en trabajos que permiten la pluralidad de visiones y visibilidad de mujeres en un género donde la historia ha sido contada mayoritariamente por hombres.
Traductora de profesión, editora por construcción y derecho propio, su trabajo ha estado marcado a fuego por su participación en la revista y web fundada por Alfredo Lewin y Cote Hurtado, permitiéndose crear sus propias reglas y formas de hacer periodismo; conocimiento que ha traducido en proyectos como revista Wow y en otros blogs relacionados a la música. El 2009, junto a Pablo Padilla, publicó “El libro blanco del rock”, que sirvió como primera guía de bandas y artistas nacionales, con casi cuatrocientos nombres que mapean la escena local y dieron visibilidad a los distintos matices que existen en el rock.
¿Cuál es tu visión o por qué has decidido involucrarte en el periodismo musical?
Mi llegada fue porque me sentía muy identificada con la línea, el estilo y la imagen de Rockaxis, yo no pensaba necesariamente en ser “periodista musical”, jamás se me pasó por la cabeza, sino que quería ser parte de una comunidad. Acababan de lanzar su sitio web y me gustaba mucho esa idea de escribir en español, de informar para Latinoamérica en un momento en que no había portales de rock en nuestro idioma. También admiraba mucho su forma DIY, el sentido de trabajo en equipo, de respeto por las distintas opiniones. Estuve en Rockaxis por 13 años y fue un período donde aprendí muchísimo, soy traductora de profesión y no tenía idea ni cómo hacer una entrevista, pero gracias al apoyo de mis colegas y amigos, crecí y avancé en este oficio hasta convertirme en editora del medio.
¿Cuáles son tus referentes en este campo y qué llama la atención de ellos?
Mi referente en el momento que llegué a Rockaxis era Alfredo Lewin. Alcancé a verlo en MTV, después, cuando regresó a Chile, lo escuché en diversas radios. También admiro a quienes han sabido forjar un camino propio, a quienes se destacan dentro de un medio en que abundan los que se autodenominan periodistas musicales, pero solo reproducen contenido de memoria. Admiro a los investigadores, a los que trabajan todo el día en la radio o en el diario o el sitio web o revista, porque esta labor requiere de mucho amor y a veces desgasta demasiado, pero siguen adelante.
Puedo estar en un error, pero, al menos en Chile, es más visible el nombre de hombres que mujeres, ¿por qué crees que la historia de este campo no ha recogido más voces femeninas?
Hasta hace un tiempo te podría haber dicho que éramos muy pocas mujeres y que por eso no lográbamos notoriedad. Pero creo que ahora la proporción ha cambiado, y a pesar de que aún las mujeres son minoría, la presencia es mucho mayor que hace una década. No podría indagar en razones sociológicas, pero sí veo que hay muchas más mujeres interesadas en el periodismo musical hoy en día, y creo que tiene que ver con que nos estamos permitiendo seguir nuestros ideales.
Dedicaste un número a la actividad de mujeres en la música; retratando lo difícil que es hacerse un nombre en un ambiente en el que predominan hombres, si hiciéramos el mismo ejercicio, pero dedicando la mirada hacia el periodismo musical, a quienes destacarías y por qué.
Creo que la mayor referente para mujeres y hombres es Marisol García. Su rol como investigadora ha contribuido enormemente no sólo al medio, sino a la cultura local, desde la edición de entrevistas de Violeta Parra a la biografía de Claudio Arrau. También es directora de prensa del festival de cine documental musical Inedit, una iniciativa que enriquece nuestra perspectiva respecto a diferentes estilos y culturas. Últimamente ha trabajado también junto a la productora Fábula en sus bandas sonoras. Por donde se vea es una figura que se merece un pedestal.
¿Cómo ves el campo en la actualidad y qué crees necesario cambiar o mejorar?
En la actualidad veo mucho comentarista de música, pero creo que es parte del cambio generacional. Creo que el periodismo en sí ha quedado en segundo plano ante la imposición de las redes sociales, aunque la labor del periodista sigue siendo necesaria para, precisamente, entregar información exacta, cierta y relevante en estos momentos en que cualquiera se autodenomina líder de opinión.