
Fearless, sin miedo. Con tamaña afirmación ha cargado en su apellido el DJ, desde que un productor lo bautizó así cuando constituían la agrupación inglesa Death in Vegas. Conversamos con el encargado del proyecto formado a mediados de los noventas, acerca del momento que vivimos, el disco “The Contino Sessions” y ahondamos en sus reflexiones en torno a la muerte. Sin miedo, por supuesto.
Por Bárbara Alcántara
5 de noviembre de 2004, estadio San Carlos de Apoquindo, son las 19:00 horas y el escenario de la segunda versión del Festival Santiago Urbano Electronic (SUE) está a punto de ser abordado por Death in Vegas, el público está ansioso, esa noche debutará Blondie y la audiencia muere por escuchar los incontables éxitos de la agrupación liderada por Debbie Harry. Para calmar esa espera y como parte del cartel del mencionado evento, suenan los beats del disco de los ingleses, “The Contino Sessions” (1999), álbum que había contado con la colaboración de Bobbie Gillespie de Primal Scream, Iggy Pop y Jim Reid de The Jesus & Mary Chain y por el cual fueron nominados al Mercury Prize el 2000, galardón que finalmente abrazó Badly Drown Boy por “The hour of bewilderbeast” (1999).
“Contino”, cómo lo llama su creador, cumplió veinte años el 2019 y es un disco electrónico, con resabios de trip hop y guitarras eléctricas que marca la etapa más exitosa del dúo compuesto por Fearless y Tim Holmes; éxito dado gracias al “hype” que se creó en torno a la producción. “Nunca lo escucho, he cargado tanto tiempo con Death in Vegas que ya no miro al pasado sino al futuro”, reconoce Fearless desde su hogar en Londres y añade, “eso no quiere decir que no haya significado algo importante en mi vida, estaba recién saliendo de la escuela de arte, no era mi plan ser músico. Fue accidental convertirme en DJ”.
Un accidente determinante en su vida dado que se transformaría en su oficio y pasión, después de aquella presentación en Chile, Richard Maguire —su verdadero nombre— publicó cuatro discos más, el último el 2016 rotulado “Transmission”, con los años se transformaría en un proyecto en solitario que él continuó. Hasta el año pasado cuando dio vida a su primer álbum firmado por él denominado “Deep Rave Memory” (2019). “Este es el primer disco que hago completamente solo, quería que dejara ver el amor que siento por la electrónica y reflejara el DJ que soy y que siempre he sido, desde antes de Death in Vegas”, cuenta mientras fuma pipazos de marihuana en la conversación por Zoom.
¿Cómo ves el futuro de la electrónica, siempre se le vio como la música del futuro y el futuro ya llegó, crees que queda más por hacer?
Sí claro, ahora es más difícil hacer algo que suene completamente fresco pero la gente aún lo hace. Es como las guitarras, que se han usado por décadas. Pero en las maquinas puedes jugar de distintas formas y tu creatividad es lo que pesa. Y, a pesar de que empecé con estos sonidos hace mucho, creo que ahora mi trabajo ha mejorado considerablemente, entonces sí, queda mucho por hacer aún.
¿Cómo ves el futuro de las raves post coronavirus?
Creo que los clubs se verán realmente afectados porque no veo como podrán volver a funcionar con su capacidad habitual. Pero las escenas más locales se van a fortalecer, así como también las fiestas ilegales, o la cultura underground. Aquí hemos visto a miembros del parlamento que rompen la cuarentena, entonces es normal que los jóvenes digan, si ellos pueden porque nosotros no, por lo tanto, es confuso.
Pero y ¿la escena más masiva?
Hasta que no exista una cura no veo cómo puede volver a normalizarse. Todas esas alternativas tipo conciertos en autos suenan como una pesadilla para mí. Lo que quiero decir es que la cultura under se verá fortalecida, pero de festivales ni hablar. Quizás por un lado es bueno, aquí en Europa había tantos festivales con las mismas bandas y DJ’s, que puede ser un llamado, no sé.
¿Cómo llevas estos días tan raros que estamos viviendo?
Ha sido muy difícil, en las últimas semanas mi esposa y yo hemos tenido que concentrarnos en nuestra salud mental, es complicado estar con los niños aquí, todos. Y yo siempre he luchado con distintos niveles de depresión, pero siento que vivimos un momento en que no hay respiro, dan ganas de desconectarse de todo, en ese sentido estoy bendecido de ser artista porque puedo escapar con lo que hago. Primero es Trump, luego el Brexit, pandemia, racismo ¿es como mucho no?
¿Has pensado mucho en la muerte?
Sí, he perdido a varios amigos recientemente, no por Covid, todo esto que pasa nos hace pensar cuan frágiles somos, pero creo que por ahora debemos aferrarnos a lo bonito que podemos descubrir, por ejemplo, ahora podemos escuchar el sonido de los pájaros y antes no se podía por el ruido.
¿Qué música te gustaría que se escuchara en tu funeral?
No he pensado en eso, pero sí en cómo me gustaría morir. Me gustaría ser atropellado por un bus, algo súper instantáneo o también un buen coctel de drogas, que sea divertido. Lo que me perturba es que te das cuenta de que todo termina. Me gustaría tener fé, pero no tengo, por eso pensar en que no hay nada más, es perturbador.