Un pacto, gesto y rito. Una declaración de principios. Un manifiesto. Invocaciones. Confianza. Hacer y creer ciegamente en el poder creativo, en salir de los lugares seguros y comunes, experimentar, jugar y sobre todo reunir. TRUST es todo eso. Una carta de presentación de un territorio en el que se habita colectivamente; una manada delicada, sensible y diversa, que deambula entre rugosidades punzantes, cálidas, suaves, llanas y frágiles.
Las publicaciones de Other People son una declaración de principios, formas de plantarse sobre el discurso; puntos de vista de nuevas formas de vida. Esta primera compilación del sello, lanzada el 2 de septiembre del 2013, fue sin duda un hito que vino a demostrar los modos de entender el sonido: una declaración de principios musical, creativa y socio-cultural que sirvió de punta de lanza de la vanguardia de los otros.
Un disco que parece el susurro innombrable de Becket que acaricia el oído y dice “¿Dónde ahora? ¿Cuándo ahora? ¿Quién ahora? Sin preguntármelo. Decir yo. Sin pensarlo. Llamar a esto preguntas, hipótesis. Ir adelante, llamar a esto ir, llamar a esto adelante”.
Ir adelante, invocar las preguntas, intentar responderlas, mientras se procesan los cuestionamientos; aprender en el ejercicio de la práctica, del hacer sin más fin que el de permitir que las ideas fluyan, que los procesos aparezcan diáfanos y que el resultado contenga ese prisma, impregnando a cada frecuencia que viaja por nuestros oídos.
Doce artistas dieron vida a este larga duración en el que participaron Will Epstein, multi-instrumentista y viejo colaborador de Nicolás, quien presentó su proyecto High Water; Nikita Quasim, otro de los antiguos compañeros de batalla, quien estuvo contribuyendo desde los inicios de Clown & Sunset; Acid Pauli, el cerebro tras Console; My Girl & Me y Quentin Pistol, dos neoyorkinos que debutaron en el sello; al igual que los productores, David Terranova; el griego, Benjha, el inglés, Triangleline y el francés, Valentin Stip; quienes junto a Nicolás Jaar dieron forma a una selección que mezcló géneros como el jazz, experimentos sonoros, ambient, piezas electrónicas, IDM, house, drone y trip-hop.
Las influencias son múltiples, las procedencias estéticas diversas; hay mucho punk en este álbum, como también sutilizas del jazz, gestos, timbres y sonidos de la música de cámara, pero sobre todo hay cruce y un relato en ese encuentro. Desde la intro al outro de Epstein, los experimentos sonoros de Quasim, las opacidades de My Girl & Me, las reminiscencias Folk de Pistol, el minimalismo de Terranova, la tensión luminosa de High Water, los timbres y ritmos hipnóticos de Benhja, el lo-fi geométrico de Acid Pauli, las evocadoras atmósferas de Triangleline, las texturas y rugosidades de Stip, el inconfundible sonido de Jaar, o la increíble relectura de Dave Harrington, son los elementos que inducen a un viaje lleno de giros, paradas y subidones que hablan de un cuerpo que se entiende como máquina deseante.
Una manera directa y sin cortapisas para concebir el universo Other People y que nos sumerge en imaginarios sin prejuicios, capaces de mezclar géneros, sonoridades y estéticas; una comunidad heterogénea, dispuesta a absorber influencias de distinta procedencia, y capaces de disolver ritmos que aceleran, frenan, irrumpen y desaparecen para mezclarlos con capas ligeras, espesas y frágiles, originadas de sonidos electrónicos y texturas punzantes, nebulosas, líquidas y atmosféricas.
TRUST es una oda delicada y un tributo a la vieja guardia del jazz, electrónica y pop; sonidos elegiacos, bailables, evocadores, e incisivos que dan cuenta de una particular mirada de la música, y de la confianza ciega en la idea de que la creatividad es capaz de reunir y resguardar la memoria futura.